
Luisa María Álvarez posa en la Explanada, uno de los espacios que más atrae a los extranjeros de Alicante.
Luisa María lleva 23 años organizando bodas y trae a extranjeros a casarse en Alicante: "Mejor que Italia"
Su negocio organiza las ceremonias en la provincia para gente de otros países que buscan el Mediterráneo para celebrar su gran día.
Más información: El sector de las bodas en Alicante celebra que aumentan un 10 % aunque con menos gasto
A los extranjeros les vuelve locos casarse en Alicante. Eso es lo que descubrió Luisa María Álvarez, que lleva 23 años organizando bodas. Desde que creó en 2019 The Wedery se encarga de crear las fiestas de ensueño para ingleses, alemanes ¡y hasta australianos! "Somos un destination wedding de los mejores que hay, mejor que Italia y mejor que Grecia", cuenta.
Si en España la tradición marcaba que la ceremonia se hiciera en el pueblo de la novia, en el extranjero hay un gran mercado para los destinos de boda. Y como apunta Luisa María, ellas mandan: "Las novias van a distintos destinos, como puede ser Grecia, Italia, España, Portugal, a casarse".
Y esa selección de países no es casual. "El Mediterráneo vende, le gusta a todo el mundo. Luego tenemos la cultura mediterránea: nos gusta el ocio, la comida es muy buena. Llegan aquí, ven el clima, los tratamos como si fueran reyes y se sienten encantados".
Su empresa arrancó en Londres. "Me fui a vivir allí y me di cuenta de que novias de Noruega, Suiza o Alemania se veían hecho viajar a Londres", recuerda, "y eso me llamó muchísimo la atención". Desde su pequeña oficina se reunía con ellas para hablar de lo que buscaban y así prepararles lo necesario.
Así fue como empezó desde la capital británica a traer estas parejas: "Nos vendíamos como la marca España porque la marca España vende". Con eso conseguía, como recalca, crear negocio para más gente. "Hoteles, restaurantes, maquillaje, fotógrafos… Todos los servicios que mi país podía ofrecer".
Una variedad que además se ofrecía entre semana porque "lo más importante es que no se casaban los sábados, se casaban martes, miércoles, jueves. Y les salía mejor de precio la misma boda".
El poder celebrar una boda entre semana permite a estas parejas extranjeras optar por tarifas menores en viajes y estancias que, además, se beneficiaban de los tipos de cambio favorables.
Luisa María puntualiza que "al principio costaba mucho traerte al extranjero". De ahí que reitera la importancia de la red de contactos que pudo establecer y el aparecer en un directorio como Bodas.net, donde aparece como servicio recomendado.
En el repaso a su trayectoria, reconoce lo complicado que fue para el sector el parón de la pandemia, justo ahora que se cumplen cinco años del confinamiento en España: "Justo cuando empezamos a funcionar bien llegó la pandemia". Eso sí, "fue un año nada más, al siguiente ya empezamos con todo otra vez".
¿Y qué es lo que más les gusta a los extranjeros? Si es natural pensar en la costa, en sitios con vistas al mar, Luis María pone un ejemplo para valorar la variedad de paisajes que se pueden encontrar en la provincia.
Este año tiene prevista una boda con una pareja australiana que ya eligió el verano pasado el valle del Vinalopó con las vistas entre viñedos que ofrece Novelda. "Y yo decía, madre mía, dos australianos aquí en Novelda en la plaza en el mes de agosto, ¡que no había nadie por el calor que hacía!".
Conseguir la luminosa boda mediterránea que sueñan desde la fría Suecia tiene un precio. El mínimo con que trabaja Luisa María es de 50 personas y "contando lo que es catering, finca, servicio de coordinación y copas, te puede salir unos 250 euros más o menos. Cuanto más personas, el precio va bajando, lógicamente".